Psoriasis
La psoriasis es patología con inflamación crónica de la piel que en ocasiones también puede afectar a las articulaciones y a veces de manera psicológica por las lesiones que provoca dicha enfermedad.
La psoriasis es una enfermedad multifactorial, algunos de los factores más importantes son los genes que se heredan, pero no se puede contagiar.
Existen algunos factores que provocan que aparezcan las lesiones en los pies como puede ser infecciones, la toma de algunos fármacos y el estrés, aunque el tabaco y el alcohol también pueden favorecer a estos brotes.
Puede aparecer en cualquier edad, los picos más frecuentes son a los 15 – 25 años y 45 – 60 años.
Se manifiestan en placas rojas que producen descamación todo en codos, rodillas, cuero cabelludo, zona sacra, pierna y pies (uñas).
El tratamiento se basará según la gravedad del paciente, en fases leves y controladas se utilizarán corticoides y derivados de la vitamina D, siendo en casos más avanzados la fototerapia, medicación (retinoides, inmunosupresores) o medicación biológicos, pero son más costosos.
Grietas/Sequedad de Talones
La sequedad de los talones o las grietas que se producen en los pies es en la mayoría de las ocasiones por falta de hidratación, continuidad y elasticidad en la piel por una menor concentración de agua en nuestro cuerpo.
Esto puede ser debido a la edad ya que en el paso del tiempo disminuye la concentración de agua, factores externos por falta de hidratación o por falta de sudoración en algunos tipos de enfermedades como la diabetes.
En otras ocasiones podemos ver que una mala pisada puede generar el crecimiento de dureza y que con el tiempo crecerá en grosor.
Además, con la sequedad estas durezas se abrirán y darán como resultado unas grietas que van a provocar dolor y heridas sangrantes.
El tratamiento estará encaminado a beber agua para hidratarse, pero lo que se recomendara será acudir a un podólogo para que pueda retirar la dureza con cuidado para que posteriormente el paciente tenga que hidratarse los pies todos los días con una crema específica a base de urea.
Pie de atleta o micosis
Pie de atleta o micosis es una infección fúngica que consiste en la propagación de hongos, dermatofitos, en los espacios interdigitales de los dedos de los pies o planta del pie provocando enrojecimiento, picor, descamación y en fases más avanzadas úlceras.
Este tipo de micosis es contagioso y podría extenderse a otras zonas del pie como las uñas, de ahí la importancia de controlar lo antes posible esta patología.
Los factores que predisponen este tipo de lesiones suelen ser caminar descalzos por zonas húmedas donde los hongos suelen aflorar, calzado muy ajustado o calcetines húmedos debido al sudor.
El tratamiento irá encaminado al cuidado de los pies con calcetines de materiales naturales, evitar patologías como hiperhidrosis, utilizar chanclas en sitios públicos y por último alguna crema antimicótica.
Sabañones
Los sabañones o eritema pernio son una inflamación dolorosa de pequeños vasos sanguíneos como respuesta a la exposición de aire frio causando picor, dolor, hinchazón o ampollas en los dedos de los pies, así como también cambios de color a azul oscuro.
Los sabañones suelen aparecer en zona distales del cuerpo (orejas, nariz o pulpejo de dedos), es decir, las partes más alejadas del corazón donde el aporte de sangre en algunas personas es menor.
Los consejos para prevenir estas lesiones son ropas aislantes, cremas específicas, ejercicio físico regular y buena dieta alimentaria con vitaminas A, C y D.
Ampollas
Las ampollas son lesiones dérmicas que presentan unas elevaciones circunscritas de la piel en la cual podemos encontrar líquido y éste puede ser seroso-sero-sanguinolento o purulento.
Suelen ser habituales en zonas de mayor contacto como pueden ser zonas de presión plantar, talón, dorso de los dedos o pulpejos.
Si mantenemos en el tiempo un clima húmedo y de calor con una constante fricción y presión vamos a provocar esas lesiones y en el momento que se formen van a provocar en muchas ocasiones incapacidad para realizar una vida cotidiana o deporte.
Para evitar este tipo de patología es muy importante una buena hidratación en los pies, evitar excesos de sudor, y la utilización en la práctica deportiva de calcetines sin costuras y térmico al igual que un calzado adecuado al tipo de pie y al deporte que se practique.
